¿Cómo interpretar la etiqueta de un saco de dormir?

Para los que disfrutamos de la naturaleza y de la montaña, el saco de dormir es una parte imprescindible de nuestro equipo. Un buen saco será tu abrigo en las noches frías y marcará la diferencia entre una buena o una mala experiencia en la montaña.

Al elegir un saco de montaña, es necesario saber dónde lo vas a utilizar. A partir de esa información, también es importante conocer el clima que hace en dicho lugar. Es decir, tener la información esencial como temperatura máxima y mínima, humedad relativa del aire, posibilidad de precipitaciones, etc. Asimismo, uno de los últimos factores a tener en cuenta pero también es importante, es el espacio que tienes dentro de la mochila.

Son muchos los factores que intervienen a la hora de comprar un saco de dormir, además de su capacidad calorífica: peso, materiales, volumen comprimido, talla, forma, para hombre y mujer, combinación con sacos sábana que multiplican su calor… En el post de hoy te explicamos qué significan las siglas de los sacos de dormir.

Lo primero de todo, es importante que sepas si el saco ha pasado las pruebas CE, según la norma EN-13537.
En la etiqueta cosida o grabada al saco con el rango de temperaturas tiene que figurar la norma EN o el sello CE. Hay que tener especial cuidado con esto, porque no es una norma obligatoria. Hay marcas que incorporan una etiqueta con temperatura de confort, límite y extrema, pero no han pasado las pruebas ni están estandarizados por la norma.
Esto lleva a confusión, porque probablemente sus prestaciones sean inferiores a las mostradas.

Tip de Sea to Summit: Busca siempre la etiqueta para comprobar que el saco cumple con la normativa

¿Por qué no es obligatorio cumplir con la normativa europea?

Los sacos de dormir no son EPIs (Equipos de Protección Individual). Es una prueba que solo la pasa quien voluntariamente decide garantizar la idoneidad de su material con una prueba oficial.

Este criterio europeo significa que todas las marcas que se adhieran a ella, como lo es Sea to Summit, tendrán el rango de temperaturas establecido por un laboratorio estándar independiente homologado.

 

¿En qué consiste la norma europea EN 13537?

Esta norma se creó en 2002 para unificar criterios sobre la catalogación de temperaturas en los sacos de dormir, y entró en vigor el 1 de enero de 2005. En 2016 fue desarrollada en la ISO EN 23537:2016, actualmente en vigor.
Tras las pruebas pertinentes realizadas en laboratorios homologados y estandarizados, se crea una etiqueta para cada modelo que estará impresa o cosida en la funda, en el saco o en ambos, que indica:

• Temperatura extrema
• Temperatura límite de confort
• Temperatura de confort
• Temperatura máxima (opcional)

Con los resultados de la prueba, se especifica el rango de temperatura de cada saco, que se indica posteriormente en la etiqueta, entendiendo que:

• Temperatura máxima: es la temperatura a la que un hombre estándar puede dormir sin sudoración excesiva. Se establece con la capucha y cremalleras abiertas, y con los brazos fuera del saco.
• Temperatura de confort: Temperatura a la que una mujer estándar puede dormir cómodamente en una posición relajada.
• Temperatura límite de confort: Temperatura a la que un hombre estándar puede dormir 8 horas en posición encogida.
• Temperatura extrema: Temperatura mínima a la que una mujer estándar puede permanecer 6 horas sin riesgo de hipotermia, aunque es posible que sufra congelaciones.

Esta clasificación de temperatura asume que:

• El usuario emplea esterilla aislante
• Utiliza una tienda de campaña que le proteja del viento, humedad, etc
• Lleva una capa de ropa interior térmica

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El motivo de la diferenciación es porque los estudios médicos indican que las mujeres son por término medio 5ºC más sensibles al frío. Por eso se fabrican sacos de dormir para mujer: además de adaptarse al cuerpo, llevan especial protección en zonas como los pies.

Está claro que no es lo mismo interpretar estos datos sin saber lo que significan que sabiendo a qué se refieren con exactitud. Cada uno conoce su cuerpo y sus respuestas, y esto lo da la experiencia.

Por ejemplo: si eres un hombre con poca tendencia al frío y sabes que la temperatura de confort indicada en la etiqueta se refiere a una mujer estándar, tienes una referencia que te indica que si lo quieres emplear en la zona alta de temperatura de confort, es muy probable que sea demasiado caluroso.
Con estos datos estándar, cada quién sabe si es más o menos friolero que los demás, los entenderá según sea hombre o mujer, etc.

Tip de Sea to Summit: puedes compararlo con sacos anteriores que hayas tenido y que cumplían la homologación. Una vez que ya sabes cuál es tu desvío sobre la etiqueta, todo es más fácil, porque las pruebas garantizar la comparación entre aquellos sacos que la lleven.

Influyen otras cuestiones, como la costumbre de aguantar frío, el estado físico, y algunos factores comunes que alguien con experiencia en la montaña conoce bien y que hay que tener en cuenta:

• Las personas jóvenes producen más calor que las de mayor edad.
• Las personas con un mayor porcentaje de grasa corporal están mejor protegidas frente al frío.
• En la montaña es común que la alimentación e hidratación no sea regular, lo que te hará sentir más frío.
• El agotamiento que puedes sufrir durante la jornada también te hará sentir más frío.

Como vemos, si conoces el significado de la etiqueta y conoces la respuesta de tu organismo, es fácil por comparación deducir cómo te vas a sentir con un saco de dormir concreto. Descubre toda nuestra gama de sacos de dormir en nuestra tienda online.